Nuestro país ha visto cómo las cadenas logísticas están sufriendo cada vez con mayor frecuencia episodios de congestión producto de diversas causales, entre las cuales se encuentran las restricciones operacionales de los puertos a causa de marejadas.
Debido a lo anterior, diversos organismos han venido trabajando para aumentar las ventanas operativas de los frentes de atraque. Por ello esta autorización es un gran avance que hace posible, bajo ciertas condiciones, las maniobras de las naves de entre 300 y 367 metros de eslora y manga de hasta 48 metros, desde y hacia los sitios 1,2, 3, Costanera Norte y Costanera Sur del puerto de San Antonio.
Esta iniciativa es parte del Plan de Logística Colaborativa (PLC), impulsado por el Ministerio de Transportes y Telecomunicaciones y de Economía, Fomento y Turismo, y responde en particular al objetivo de mejorar la productividad de los activos logísticos disponibles, en particular áreas de abrigo y muelles. La nueva resolución demuestra que con la voluntad y disposición de todos los actores involucrados es posible avanzar con celeridad en medidas que impulsen la productividad sin comprometer la seguridad.
El aumento de la altura de ola en la restricción de operación, es producto del trabajo mancomunado de EPSA, los concesionarios, la Dirección General del Territorio Marítimo y la Capitanía de Puerto, lo que permitió la realización de todas las pruebas e informes que dieran las garantías de seguridad en la operación para operarios, naves e infraestructura portuaria.
Esta materia fue abordada en la Mesa de Servicios de Apoyo a las Maniobras (SAM) que impulsa MTT en conjunto con Directemar y otros actores respecto a Puerto San Antonio. En ella se levantó la existencia de brechas de dichos servicios y se propusieron tareas para una pronta solución que permitiera la operación bajo este nuevo parámetro de autorización.
